Recetas de puré de manzana
No hay nada mejor que el sabor de la compota de manzana casera, ¡y es tan fácil de hacer! Todos los años, empezando a mediados del verano con las manzanas Gravenstein, y hasta finales del otoño con las manzanas Granny Smith y Fuji, mi padre elabora docenas de lotes de puré de manzanas recogidas de sus árboles. La congela en grandes tarros de un cuarto de galón para que la disfrutemos todo el año.
También le gusta mezclar otras frutas con la salsa. Mezcla arándanos frescos con las manzanas para hacer puré de arándanos, o tallos de ruibarbo para hacer puré de ruibarbo. Las ciruelas y las ciruelas pasas también se incluyen en la compota de manzana.
Si tiene un molinillo de alimentos, puede omitir el pelado y descorazonado de las manzanas y cortarlas en cuartos. A continuación, cocine como se indica en el paso 1. Una vez cocidas las manzanas, pásalas por el pasapurés. Si la compota de manzana es demasiado fina, devuélvela a la olla y cuécela un poco más, removiendo a menudo, hasta que tenga la consistencia que te guste.
La compota de manzana es la base de la mantequilla de manzana. Una vez que la hayas hecho, tendrás el comienzo de nuestra increíble mantequilla de manzana, ya que la mantequilla de manzana no es más que una versión más concentrada y endulzada de la salsa de manzana suave.
Tarta de puré de manzana
Las temperaturas del horno son para el convencional; si se utiliza el ventilador (convección), reduzca la temperatura en 20˚C. | Utilizamos cucharadas y tazas australianas: 1 cucharadita equivale a 5 ml; 1 cucharada equivale a 20 ml; 1 taza equivale a 250 ml. | Todas las hierbas son frescas (a menos que se especifique) y las tazas están ligeramente envasadas. | Todas las verduras son de tamaño medio y están peladas, a menos que se especifique. | Todos los huevos son de 55-60 g, a menos que se especifique.
Pelar, descorazonar y trocear las manzanas. Poner las manzanas y un chorrito de agua en una cacerola mediana a fuego medio-bajo. Tapar y cocer, removiendo de vez en cuando, durante 8-10 minutos o hasta que estén tiernas. Remover y triturar las manzanas, todavía sobre el fuego, hasta que se deshagan; deben estar blandas y bastante espesas.
El puré se conservará durante 3-4 días en un recipiente hermético en el frigorífico. También se puede congelar durante un par de meses: se puede repartir el puré en pequeños recipientes o ponerlo en bandejas de cubitos de hielo, congelarlo y cerrarlo en un recipiente hermético.
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Cuando los bebés pasan del biberón a la comida sólida, los purés de fruta y verdura son un gran alimento de transición. Por suerte para los padres, hacerlos no es demasiado difícil. Dado que las manzanas se venden en todas las tiendas de comestibles y se disfrutan bastante, el puré de manzana es un alimento perfecto para que los bebés lo prueben. Todo lo que necesitas son algunas manzanas y agua, ¡y ya estás listo!
Resumen del artículo Para hacer puré de manzana, empieza pelando y descorazonando tus manzanas para deshacerte de la piel y las semillas. A continuación, utiliza un cuchillo para cortar las manzanas en trozos pequeños. A continuación, pon las manzanas en una olla con suficiente agua para cubrirlas todas y lleva el agua a ebullición. Cuando empiece a hervir, baja el fuego y deja que las manzanas se cuezan a fuego lento, sin tapar, durante 10 minutos. Pasados los 10 minutos, escurre las manzanas y enjuágalas con agua fría para que dejen de cocerse. Por último, tritura las manzanas con un pasapurés o mételas en la batidora para hacer el puré. Para saber cómo elegir las manzanas para hacer el puré, ¡sigue leyendo!
Puré de manzana tesco
El puré de manzana es un alimento estupendo para tu bebé: Puede servirse solo o con otros platos, como las papillas o el puré de carne cocida. Además, puedes preparar una pequeña cantidad cada vez, o cocinar en lote y congelar porciones individuales en una bandeja de cubitos de hielo, para luego recalentarlas cuando las necesites.
El puré de manzana es una cosa estupenda para tu bebé: Puede servirse solo o con otros platos, como las papillas o el puré de carne cocida. Además, puedes preparar una pequeña cantidad cada vez, o cocinar en lote y congelar porciones individuales en una bandeja de cubitos de hielo, para luego recalentarlas cuando las necesites.